¿Cómo educar el esfuerzo?

¿Cómo educar el esfuerzo?

– Acostúmbralos desde pequeñitos a superar dificultades acordes con su edad.

– Facilita su autonomía y la asunción de responsabilidades.

– No evites que se equivoque y no sobreprotejas.

– Da ejemplo de persistencia. Juega con ellos y edúcalos a mantener la atención.

– Enséñale a aplazar la recompensa.

– Educa su lenguaje y su diálogo interior asertivo.

– Educa su capacidad  para afronta la frustración.

– No impidas que tu hijo tu hijo se exprese. Muchas veces nos intentan explicar cualquier cuestión y ya estamos nosotros acabando la frase, anticipándonos y poniendo solución.

– Valora la actividad, tanto física como intelectual que realiza tu hijo durante el día.

– Fomenta el compromiso con sus actividades, tanto de estudio como de ocio (deportes de equipo, actividades escolares de grupo, etc.).

– Evita ser manipulado.

– Acostúmbralos a adquirir compromisos y metas realistas.

– Da ejemplo diario, controlando tus emociones cuando las cosas no salgan como esperabas.

– Sentido del humor. Enseñarles a superar con las situaciones frustrantes con humor, «des-dramatiza« (sin ridiculizar).

– Transmíteles la idea de que el fracaso es pedagógico, legítimo (de él se aprende) y no es motivo de burla ni humillaciones.

– Edúcalos para ser resilientes.

Todo esto se debe fomentar en los niños desde muy pequeños, teniendo presente que la postura que adopten los padres tiene una importancia fundamental (aprendizaje vicario). El aprendizaje vicario o social es la adquisición inconsciente, involuntaria y por impregnación de nuevas conductas a través de la observación.

ATENCIÓN PSICOPEDAGÓGICA

A DOMICILIO

en Barcelona, Sant Cugat, Sabadell, Terrassa, Vallès Occidental.