Competencias emocionales

Competencias emocionales

Consciencia emocional. Consiste en conocer las propias emociones y las emociones de los otros. Esto se consigue con a observación del propio comportamiento así como de las personas que nos rodean. Supone saber distinguir entre pensamientos, acciones y emociones; comprender causas y consecuencias de las últimas; evaluar su intensidad, y reconocer y utilizar su lenguaje, tanto en comunicación verbal como no verbal.

La regulación de la emociones significa dar respuesta apropiada a las emociones que experimentamos. No debemos confundir la regulación emocional con la represión. la regulación consiste en un difícil equilibrio entre la represión y el descontrol. Son componentes importantes de la habilidad de autorregulación la tolerancia a la frustración, el manejo de la ira, la capacidad de retardar gratificaciones, las habilidades de afrontamiento en situaciones de riesgo (inducción al consumo de drogas, violencia, etc.), el desarrollo de la empatía, la resiliencia, etc.

Algunas técnicas concretas para la regulación emocional son: el diálogo interior, las auto-instrucciones, el control del estrés (relajación, meditación, respiración), autoafirmaciones positivas; la asertividad, la reestructuración cognitiva, la imaginación emotiva, la atribución causal, etc. El desarrollo de la regulación emocional requiere una práctica continuada. Es recomendable comenzar por la regulación de emociones como la ira, el miedo, la tristeza, la vergüenza, la timidez, la culpabilidad, la envidia, la alegría, el amor, etc.

La autonomía emocional es la capacidad de no verse seriamente afectado por los estímulos del entorno. Se trata de tener sensibilidad e invulnerabilidad. Esto requiere una sana autoestima, autoconfianza, percepción de autoeficacia, automotivación y responsabilidad. La autonomía emocional es un equilibrio entre la dependencia emocional y la desvinculación.

Las competencia para la vida y el bienestar son un conjunto de habilidades, actitudes y valores que promueven la construcción del bienestar personal y social. Aprender a fluir. El bienestar emocional es el más parecido a la felicidad, entendida como la experiencia de emociones positivas. No podemos esperar a que nos vengan estos estados emocionales, sino que debemos construirlos conscientemente, con voluntad y actitud positiva. Esto es posible y deseable.

Fuente: Bisquerra (2009). GROP Grup de Recerca en Orientació Psicopedagògica. Universitat de Barcelona.

Consciencia emocional en los padres.

Consciencia emocional en los hijos.

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