Los adolescentes y la familia

Los adolescentes y la familia

Dad a vuestros adolescentes ocasión de contribuir activamente en las decisiones comunes relativas a la casa. Será un medio de dominar razonablemente la exagerada tentación de evadirse del hogar familiar.

La experiencia demuestra que los muchachos cuya opinión se tiene en cuenta en los asuntos del gobierno de la casa, la alimentación, las obligaciones, las diversiones, etc.,  buscan menos que otros ejercitar la libertad fuera.

Sobre todo, ante las manifestaciones de independencia, de evasión, de oposición, no dramaticéis. Nada de escenas, lágrimas o reproches…; menos aún, nada de violencias físicas o verbales.

En esta edad más que nunca, hay que saber persuadirlos y procurar no obligarlos.

Cuando deseéis conseguir alguna cosa de ellos, apelad a los motivos más elevados; no os apoyéis en motivos exclusivamente utilitarios; a pesar de las apariencias, están en la época de los idealismos desinteresados. Para muchos, es también la edad de la poesía, del rap, en la que gusta hacer versos sobre todo y a propósito de todo. La cándida adolescencia.

En términos generales, evitad burlaros de ellos; mostraos compasivos; más aún, hacedles sentir que los comprendéis. Conservaréis de esta manera ante ellos la autoridad moral, de que tanta necesidad tienen, sin que lo sepan, para ayudarlos a canalizar en buen sentido, las fuerzas nuevas y magníficas que los encaminan hacia la edad adulta y la «libertad» que anhelan.

Tranquilizaos; esos años difíciles pasarán. Si vuestros hijos comprenden que los amáis por sí mismos, que no solamente no queréis impedir que crezcan, sino que deseáis ayudarlos a conseguir una personalidad de hombres o mujeres dignos de tal nombre, vuestros hijos y vuestras hijas conservarán su confianza en vosotros y, pasada la crisis, sentirán y os demostrarán un afecto redoblado.

  Los adolescentes y la familia.

ATENCIÓN PSICOLÓGICA Y EDUCATIVA A DOMICILIO en Terrassa, Sabadell, Sant Cugat, Barcelona.