Niños empáticos

Niños empáticos

La empatía se puede definir como la capacidad de percibir los sentimientos de otra persona y ponerse en su lugar.

Se produce empatía cuando una persona expresa simpatía, compasión, alegría o tristeza en respuesta a las emociones de los otros.

Los estudios sugieren que los niños son más propensos a desarrollar un fuerte sentido de empatía cuando sus propias necesidades emocionales están siendo satisfechas en el hogar (Barnett 1987).

Cuando los niños tienen relaciones de apego seguro (saben que pueden contar con sus cuidadores para el apoyo emocional y físico) son más propensos a mostrar empatía y ayudar a otros niños en situaciones de peligro (Waters 1979; Kestenbaum 1989).

Otras investigaciones indican que los niños son más propensos a mostrar preocupación empática por los demás si tienen padres que les ayuden a hacer frente a las emociones negativas, a la resolución de problemas o a saber poner nombre a los sentimientos.

Como adultos, los que fueron niños con Apego Seguro tienden a tener relaciones de confianza y de largo plazo. Otras características clave de los individuos con Apego Seguro incluyen tener una alta autoestima, disfrutando de las relaciones íntimas, la búsqueda de apoyo social y la capacidad de compartir sus sentimientos con otras personas.

Educar la empatía.

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